25 nov 2010

¡Basta de publicidad!


Prender la tele un rato para que los chicos miren una película o algunos dibujitos animados se ha convertido en un verdadero calvario para las madres (y para los padres, también).
Publicidad, publicidad, publicidad… no dejan de bombardearnos, a los adultos y a los chicos que, en consecuencia, nos atacan también.
Pañales que no paspan, juguetes carísimos, yogures que adelgazan, cereales que los hacen fuertes, cremas que evitan nuestras arrugas, shampoos que nos dejan el pelo sin frizz, alimentos saludables para los niños…. debo reconocerlo: ¡creo casi todas las mentiras que entran por los ojos y me enojo cuando no consigo los resultados prometidos!
A modo de ejemplo, aquí algunos casos:
- Detergentes, limpiadores, jabones, esponjas, desodorantes para inodoros, etc: todas, sin excepción, son publicidades que utilizan madres preciosas, bien vestidas, bien peinadas, felices y contentas… ¡limpiando la casa! Nunca logro pasar por esos estados de ánimo mientras limpio… y menos aún, logro verme preciosa, con un pantaloncito blanco, el pelito planchado, un collar precioso y una esponja en la mano… Indignante.
- Patitas de pollo, salchichas, ketchup, mayonesa, papas fritas con forma de caritas sonrientes, bastoncitos de calabaza o espinaca: toda comida chatarra, claro. Pero presentada como saludable, sin grasas “trans”, con muchas proteínas, vitaminas, minerales y cocidas a base del mejor pollo y las verduras más naturales que se nos puedan ocurrir. Y que resulta imposible, ¡sí, imposible! de reemplazar con pollo al horno, puré recién hecho, tarta de espinaca o acelga, carne asada, ensaladitas o cualquier opción saludable que se te ocurra presentarles como almuerzo. El grito de ¡quiero patitas! ya me tiene agotada…
- Juguetes difíciles: sí, difíciles, complicados, imposibles de utilizar como te los muestran en la tele. ¿Quién no compró el maquillaje de la maldita muñeca rosa y después de dos horas de pintar a su hija, ella se miró en el espejo y exclamó, enojada: ¡te quedó horrible, mami, yo lo quería como en la tele! Y para el caso de los varones: ¿no les pasó que compraron la pista de autos que da varias vueltas, con rulos, subidas y bajadas y después tardaron un año y medio en aprender a armarla, bajo la mirada impaciente del pequeño? ¡No somos maquilladoras profesionales ni ingenieras, sólo somos madres!
- Yogurt para el “tránsito lento” que te dejan la panza chata, impecable, divina: sí, claro. Voy a quedar así de divina, si acabo de salir del puerperio, tengo toda la piel estirada, varios kilos de más y encima me como todos los restos de comida que dejan los chicos porque “la comida no se tira”. Y encima hay que vestirse con ropa violeta, para quedar a tono con el envase del yogurcito, como la chica de la propaganda…
- Cereales que dan energía, flancito que te “sacan músculos”: ¡mami, mirá que rico, mami hay que comprar, mami, así tengo fuerza!... parece un disquito rayado… y ante las góndolas, se repita la misma historia. Lo peor es que, generalmente, no les termina gustando, es distinto a lo que se veía en la pantalla y me lo termino comiendo yo… y ¿después me preguntan por qué no me hacen efecto los yogurcitos diet que me como?

¡Basta! Alguien que se apiade. Las mamás no podemos estar divinas, limpiando la casa. Ni con la pancita chata, comiendo cosas light. Ni presentando juguetes sobredimensionados en la pantalla ante los ojos desilusionados de nuestros pequeños.
Bien lo dijo el célebre publicista Leo Burnett: “la publicidad no es la más noble creación de la mente humana…”

3 comentarios:

Anónimo dijo...

post impresionante. Realmente disfruté la lectura de su blog.

Anónimo dijo...

Lo que es un buen puesto. Me encanta la lectura de estos tipos o artículos. Puedo? Esperar a ver lo que otros tienen que decir.

Borja Borrachero Tamame dijo...

Enhorabuena por el blog, me pasaré más a menudo a hacerte una visitilla. Te facilito mi dirección de blog por si te interesa mi recurso didáctico de cuentos infantiles. Espero que te guste.

http://quincecuentosparacrecer.blogspot.com/

Un saludo ;-)