14 jun 2010

De antojos e hinchazones... molestias y síntomas durante el embarazo


¿Tenés náuseas por la mañana? ¿Tenés más sueño del habitual? ¿Los pies se hinchan y la espalda molesta? ¿Te salieron manchas en la cara? No te angusties… los síntomas y molestias del embarazo son muchos y variados pero la mayoría desaparece después del parto.
Tu Bebé Crece consultó con el doctor José María Courtis, Ginecólogo y Obstetra sobre la causa de estos síntomas y nos contestó así: “los síntomas que se producen durante el embarazo son debidos al aumento de una hormona llamada Gonadotrofina Coriónica Humana que es secretada por la placenta y que, al unirse a distintos receptores produce, por ejemplo náuseas y vómitos. Tales síntomas se encuadran dentro de los síntomas inespecíficos asociados al embarazo y hacen sospecharlo en mujeres con atraso menstrual”


Pero, ¿cuáles de estas molestias son habituales en un embarazo y no deben preocupar? ¿Y cómo intentar que sean más leves?
- Náuseas y vómitos: son absolutamente corrientes en las primeras doce semanas. Cada mujer es única por lo que lo que sirve para una, no es útil para otra. Entre las cosas que pueden ayudar encontramos la ingesta de líquidos fríos, comer aceitunas o galletitas de agua, evitar alimentos grasos o muy condimentados, evitar las grandes comilonas… algo importante a tener en cuenta es que por suerte, ¡el famoso Reliverán es uno de los pocos medicamentos autorizados durante el embarazo!
- Constipación: por efecto de la progesterona, hormona encargada de inhibir las contracciones del útero y que también inhibe el tránsito intestinal. Una buena ayuda puede ser la de ingerir alimentos ricos en fibra y cítricos.
- Orinar con mucha frecuencia: debido a la compresión que ejerce el útero sobre la vejiga, su capacidad disminuye y en consecuencia se orina con mayor frecuencia. Esto suele ser terriblemente molesto, sobre todo por las noches, ya que te obliga a levantarte muy seguido para ir al baño: ¿será una preparación para que te acostumbres a dormir salteado?
- Calambres en las piernas: muy frecuentes, sobre todo durante la noche, son causados por problemas circulatorios originados por el aumento de peso. Masajes, comer alimentos ricos en vitamina B y calcio, ejercicios tipo yoga o eutonía son todas posibles ayudas.
- Dolores parecidos a los menstruales: son causados por el crecimiento del útero y parecen tironcitos en la parte baja del abdomen. Si cambias de posición o te recuestas un rato, pasan.
- Celulitis: este “maldito” depósito de grasa es una reserva energética que generalmente desaparece durante la lactancia con una dieta adecuada y algo de ejercicio. Otra cosa que favorece es el uso de cremas especiales y masajes.
- Picazón en el abdomen: por el estiramiento de la piel de esa zona. Se puede evitar hidratando todos los días tu pancita con una buena crema.
- Piernas hinchadas: esto es por la retención de agua en los tejidos, especialmente en los pies. Algo muy bueno para aliviar esta molestia es elevar las piernas cada vez que puedas, evitar ropas ajustadas y tacos muy altos. Y no permanecer durante mucho tiempo parada ni sentada con las piernas cruzadas.
- Dolor de espalda: es una cuestión de sobrepeso sobre tu pobre espalda, no acostumbrada a lidiar con semejante panza. Algo bueno para esto es dormir de costado, con una pierna estirada y la otra flexionada y una almohada entre ambas.
- Cansancio excesivo: es usual estar más cansada de lo habitual y con mucho sueño. Esto es porque durante las primeras semanas del embarazo, el cuerpo produce más sangre para llevar nutrientes al feto, el corazón multiplica sus esfuerzos, el pulso aumenta… ¡como para no sentir cansancio! Lo ideal en esta etapa es descansar, como mínimo, ocho horas diarias y en lo posible, hacer una siesta reparadora en medio de la tarde.
- Antojos y olores extraños: se pueden experimentar antojos poco habituales por la comida o rechazo de comidas que normalmente te gustaban. No existe una explicación científica para los antojos pero… un mimo para la futura mamá nunca viene mal.
- Acidez: ocurre cuando los alimentos digeridos son empujados desde el estómago al esófago, causado también por las benditas hormonas que enlentecen el proceso digestivo y por el útero engrandecido que empuja al estómago hacia arriba. Comer pocas cantidades, tratando de no llenar mucho el estómago puede ayudar.
- Cambios mamarios: los pechos se vuelven más pesados y grandes, se sienten más sensibles, la areola se torna más oscura, por debajo de la piel aparece una red de líneas azuladas ya que aumenta la afluencia de sangre. Algo muy importante es mantenerlos bien hidratados para evitar estrías, lo ideal es consultar con un buen dermatólogo por este tema y por el cloasma. - Dificultad al respirar: es normal durante el tercer trimestre porque el bebé está ocupando mucho espacio en tu panza. Para facilitar la respiración, sobre todo al dormir, lo ideal es dormir semisentada, apoyada en varias almohadas y evitar los lugares contaminados y aglomerados.
- Cloasma: son manchitas oscuras que aparecen en la piel, sobre todo en la cara, causadas por las ya nombradas hormonas. A veces desaparecen después del parto, otras no. Hay que evitar la exposición al sol y usar un protector con factor 50 o mayor.

El Dr. Courtis nos cuenta, por ejemplo que “las manchas de la cara o la hiperpigmentación de cicatrices o lunares, de la línea alba (que es la que va del ombligo al pubis) o de los pezones se deben a un aumento de la melatonina cuyo principal objetivo es la hiperpigmentación de la areola y el pezón para que el bebé pueda identificar el pecho para poder amamantarse ya que cuando nace tiene una visión muy precaria y esto les facilita la lactancia”
Como ven, cada síntoma o molestia tiene un motivo y una explicación. Algunas de una mayor utilidad, como la explicada por el especialista y otras sin causa aparente como los antojos. No asustarse, ya que son propias del estado en que estás, es importante. Y saber qué hacer para estar más cómoda también. Por ello no dudes en preguntar, a tu obstetra, a tu partera o a tu profesora de yoga: alguna idea te va a resultar práctica y útil para lo que te está pasando.

José María Courtis es Médico Ginecólogo y Obstetra. Obtuvo su título en la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires (UBA). Actualmente se desempeña como médico de planta del servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital de Cutral-Có/ Plaza Huincul.

1 comentario:

Gerardo dijo...

Me encantó su nota, hasta ahora no he tenido ninguna molestia pero he disfrutado mucho, es una experiencia nueva y de verdad que mi pareja y yo somos muy felices.
Les mando una página que me ha servido mucho http://www.1001consejos.com/familia/concebir/85_19-sintomas-y-molestias-durante-el-embarazo/